Un estudiante que no está al ritmo académico que sus compañeros de clases no se siente bien consigo mismo.
Por Dra. Nancy López
Si tu hijo no tiene un impedimento cualificado, es decir, no le han realizado un diagnóstico, existen leyes estatales y federales que protegen la población de estudiantes con necesidades especiales
El viernes, 3 de mayo de 2013, esta servidora dialogó sobre el área de problemas específicos en el aprendizaje. Para aquellos lectores que no tuvieron la oportunidad de leer el artículo y para aclarar el significado de PEA, se mencionó que un niño o joven debe presentar dificultad en entender o usar el lenguaje hablado o escrito que se puede manifestar en dificultades como: escuchar, pensar, hablar, leer, escribir, deletrear o el uso de cálculos matemáticos. Estas características son establecidas en la Ley IDEIA de 2004, sus siglas significan Individuals with Disabilities Education Improvement Act (Acta para el Mejoramiento de la Educación de Individuos con Impedimentos). Favor de referirse al artículo del 3 de mayo para más información. Estos niños diagnosticados con PEA, tienen un cociente intelectual promedio o sobre el promedio. Dentro de esta población hay estudiantes con doble excepcionalidad, como, por ejemplo, los dotados y los talentosos con PEA.
Características emocionales en el área de PEA
La definición de PEA descrita en la Ley IDEIA falla en incluir el área emocional, característica que observamos a diario en los niños y los adolescentes. Un estudiante que no está al ritmo académico que sus compañeros de clases no se siente bien consigo mismo. Su autoconcepto y autoestima se afectan por el fracaso escolar en diversas materias. Si a un niño, por ejemplo de cuarto grado, se le dificulta la lectura, es decir, en el deletreo, área fonológica, en la comprensión o una combinación de las mismas, no solamente se obstaculiza el trabajo escolar sino también las actividades del diario vivir, como leer los subtítulos de una película, un menú cuando sale a comer con sus padres, alguna noticia del periódico, instrucciones de un juguete y otros. l área emocional es importante para la obtención del éxito escolar. Daniel Goleman, conocido investigador y autor de varios libros en el área de inteligencia emocional destacaba que es importante el "control de los impulsos y las emociones". Esto permite que la persona se adapte a las diversas situaciones difíciles, que obtenga o disfrute el logro de unos estándares de excelencia, iniciativa y optimismo; sobre todo manifieste honestidad. Los estudiantes a los que se les dificultan varias materias escolares no desean hacer las asignaciones, no quieren ir a la escuela, pueden presentar problemas físicos reales o inventados, como dolor de estómago o de cabeza para evitar enfrentarse a los que es aversivo: cumplir con las tareas escolares. Para aclararle al lector, a continuación se presenta una lista del efecto de PEA en el área emocional del niño o adolescente:
* Dificultad de aprender de los errores.
* Inhabilidad en utilizar el juicio social.
* Evita asistir a la escuela.
* No quiere realizar las asignaciones.
* Se critica a sí mismo con expresiones como: "soy bruto o estúpido", "no sirvo para nada".
* Se queja de la maestra.
* Presenta quejas somáticas como dolor de estómago, náusea, diarrea, dolores de cabeza y otros.
* Se involucra en peleas con otros alumnos.
* Sufre de acoso escolar.
* Evita enseñarle las asignaciones a los padres.
* En la adolescencia comienza a ausentarse de las clases y puede convertise en delincuente juvenil.
¿Qué podemos hacer?
Es importante que los padres no critiquen a sus hijos si observan que tienen dificultad en una o varias materias. A base de mi experiencia como educadora y clínica, observo crítica tras críticas hacia el niño o el adolescente. Ustedes no saben el daño que puede causar en un niño. Palabras como, por ejemplo, tú eres "bruto", "tú hermano es más inteligente que tú", "eres estúpido" o le pega porque no quiere hacer las asignaciones. Esa actitud de tipo maltratante corroe lo más íntimo de su ser. Todo ser humano necesita ese sentido de logro, tú como padre, madre o custodio del niño debes estimularlo en su trabajo y en su vida personal. De la misma forma, tu hijo no necesita escuchar todos los días una letanía de palabras negativas. Busca soluciones, ¡no critiques! Si no puedes trabajar con la situación, busca ayuda de un profesional de la salud. Si no puedes sufragar los gastos, habla con la maestra, la trabajadora social de la escuela o con la consejera escolar. Si tu hijo no tiene un impedimento cualificado, es decir, no le han realizado un diagnóstico, existen leyes estatales y federales que protegen la población de estudiantes con necesidades especiales. Se le realiza una batería de pruebas completamente gratis y se ubica en un lugar que no sea restrictivo para el niño, hasta donde sea posible con niños típicos. Además, es importante realizarle un "assessment" funcional de la conducta, de esa forma investigamos los antecedentes que propician esa conducta atípica en el niño. Recuerda, al entender y atender a tus hijos evitamos situaciones que luego lamentamos.
En el próximo artículo, que se publicará el viernes, 13 de diciembre de 2013, la doctora Nancy López dialogará sobre la importancia del apoyo verbal en los niños y los adolescentes.
La Dra. Nancy López es catedrática del la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras y autora del libro Desórdenes emocionales o de conducta: "Assessment", intervención y praxis educativa. Para información, escribe a nlopez_speduc@yahoo.com.
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